lunes, 2 de abril de 2007

Un apluso por favor...



Hay cosas que uno no puede entender…

Y hoy en este espacio, quiero rendirle homenaje a un ser humano increíble, a un profesional entregado, a un padre de familia amoroso, a un médico innato, a un hijo ejemplar, a un hermano accesible, a un amigo sincero, a una persona alegre…su nombre es Guillermo Lou, y es mi tío.

Erradicar el vacío y el dolor de la pérdida de un ser querido, es una tarea imposible. No nos queda más que tratar de emanciparla con los hermosos recuerdos que esas personas han dejado en nosotros.

Hace dos días, mi tío nos dejó… pero sabemos que solamente ha sido por un momento, porque algún día volveremos a encontrarnos…

Sólo en estos momentos es que entendemos y nos damos cuenta que somos realmente nada. Un instante puede ser la diferencia…

Hoy mi corazón llora de tristeza y dolor… El transitar por la vida y el ejercicio constante del aprendizaje aún no incluye en el paquete, la muerte.

Pero no me queda más que agradecerle a él. A ese hombre que me dio muchas alegrías, que compartió conmigo sus consejos, quien me cuidó, quien se entregó en amor a su todos nosotros.

Llemo”, sabe que nunca lo voy a olvidar, que aunque estemos separados por la distancia, estaremos unidos siempre de corazón.


Lo quiero mucho …¡Hasta pronto!…